miércoles, 6 de julio de 2011

El buen testimonio



Si hemos recibido a Cristo en nuestro corazón, ahora es muy importante saber que hemos dejado atrás todo lo que hacíamos antes, osea que somos nuevas personas y nuestro comportamiento debe ser nuevo también, es importante que nuestro testimonio delante de otros sea muy diferente, y no solo delante de otros, sino siempre, nuestro manera de vivir y de hacer las cosas debe ser nuevo.


Historia de la Biblia:

Hechos 6:1-7

Esta historia nos cuenta de cuando los discípulos de Jesús buscaron a siete hombres de buen testimonio para encomendarles una tarea, ya que los griegos empezaron a murmurar con los hebreos, de que las viudas estaban mal atendidas, entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos y encargaron buscar entre los hermanos a siete varones que debían tener buen testimonio, además debían estar llenos del Espíritu Santo y de sabiduría.

Los doce necesitaban a quien delegar este trabajo para ellos seguir en el ministerio. Esta propuesta fue de agrado para la multitud, quienes eligieron a: Esteban, Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás, los cuales se presentaron ante los apóstoles, quienes y oraron por ellos.



Pasaje:

“Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría,…” Hechos 6:3


Aplicación:

Cuando los apóstoles de Jesús buscaron a estos siete hombres, tenían en mente algunos requisitos que debían cumplir, tener buen testimonio y estar llenos del Espíritu Santo. Igualmente, debemos nosotros como siervos de Jesús, tratar de tener el mejor testimonio posible, las personas que nos rodean deben ver en nosotros algo diferente, deben ver a Cristo reflejado en nuestra vida, para que otros puedan conocer de Cristo atreves de nosotros.

Ayuno



Conceptos:

Tomado de: El Diccionario de la Real Academia Española (DRAE)

Ayuno: Abstenerse total o parcialmente de comer o beber.

Ayunar además de abstenerse de comer, es una forma de quitar la parte de nosotros que nos estorba cuando tenemos una relación con Dios, es una manera de sensibilizar nuestro espíritu para poder tener una mejor relación con El.

Lo que no se debe hacer cuando se está ayunando.

 Continuar con nuestros malos hábitos, buscando solo nuestro propio beneficio sin importarnos los demás.
 No debemos entrar en contiendas y debates vanos, el ayuno sin un verdadero motivo espiritual nos hace irritables.
 En Zacarías 7:5 vemos como no es del agrado de Dios que cuando ayunamos estemos llorando o quejándonos por causa de nuestro ayuno.
 En Mateo 6:16, no debemos poner cara de angustia cuando ayunamos, y menos andar contando lo que estamos haciendo, lo que hacemos en lo secreto Dios nos lo recompensa en público.

Como o por que ayunar

 Debemos soltar todos las cargas de opresión, cuando nos disponemos a ayunar es necesario que nos despojemos de toda carga.
 Cuando ayunamos es necesario que aprendamos a perdonar a todo aquel que nos ha hecho daño y a liberarnos de todo resentimiento.
 En este tiempo de ayuno es necesario que hagamos el propósito de romper todo yugo, todo lo que nos mantenga unidos al pecado, o que no nos deje ser libres, como por ejemplo un vicio o mala amistad.
 En el tiempo de ayuno Dios nos quiere con un verdadero cambio de actitud con respecto a nuestro prójimo, Dios quiere que todo egoísmo sea quitado de nosotros, que realmente amemos a nuestro prójimo.
 El ayuno nos prepara para estar firmes para cuando llegue la tentación.
 El ayuno nos hace más fuertes para pelear la batalla (Mateo 17: 14-21).
 El ayuno nos hace más sensibles a la voz de Dios. ( Éxodo 34: 27-28 )

El verdadero ayuno, el cual incluye un real cambio de actitud tiene mucho poder, tanto que puede cambiar el destino de toda una ciudad… Jonás 3


Historia de la Biblia:

Mateo 4:1-11.

Esta historia nos cuenta de cómo Jesús fue guiado al desierto por el Espíritu Santo por 40 días, Jesús ayuno durante este tiempo tuvo hambre y vino a Él, el enemigo y trato de persuadirlo para que pecara. Satanás le dijo a Jesús: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan, El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

Pero el diablo no contento con la respuesta de Jesús le a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra, a esto Jesús le contesto: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.

Pero el diablo no se quedo tranquilo con la respuesta de Jesús y volvió a intentarlo otra vez, lo llevo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares. Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás. El diablo entonces vio que no podía tentar a Jesús y se fue, entonces vinieron los ángeles y le sirvieron para que Jesús comiera.


Pasaje:

“Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo, Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre” Mateo 4:1-2.


Aplicación:

Como podemos ver el ayuno no es simplemente dejar de comer o aguantar hambre por algunas horas, es algo más profundo. Jesús después de su ayuno de 40 días fue tentado por el enemigo, como es Dios, iba a vencer cualquier tentación, pero si nosotros ayunamos, esto nos hará más fuertes cuando venga una tentación o una prueba a nosotros.

Bases firmes


Cuando venimos a los pies de Cristo, vienen cosas que nos atacan, problemas, dificultades y circunstancias difíciles que muchas veces hacen que dudemos y hasta volvamos atrás. Por eso es tan importante que las bases en las cuales estamos siendo plantadas sean bien solidas, muy firmes para que cuando las dificultades aparecen, no puedan hacernos daño. Pero que tan fuerte estemos, va a depender de las bases en las que estamos siendo plantados.


Historia de la Biblia:

Lucas 6:46-49, Mateo 7:24-27.

Esta historia nos cuenta de dos hombres uno prudente y uno necio. El hombre prudente, cuando quiso edificar su casa, cavo muy hondo y puso las bases sobre la roca firme. El hombre necio no cavo hondo, sus bases quedaron sobre la arena o la tierra. Cuando vino la lluvia fuerte y hubo inundación el río se llevo la casa del necio y la del prudente no. La casa del prudente tenía bases muy firmes que hicieron que se sostuviera muy fuerte mientras era amenazada por el agua, la del necio no, ya que sus bases estaban en la arena y esta es lavada por el agua, por lo tanto la casa se cayó.

Estudie la lección y cuéntela a los niños, haciéndoles ver cuán importantes es que tengamos nuestras bases como cristianos bien cimentadas. No dejarnos llevar por lo que otros puedan decir o por los ataques y asechanzas del enemigo.


Pasaje:

“por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente…” Mateo 7:24


Aplicación:

Es importante que nuestras bases como cristianos estén cimentadas en la roca firme que es Cristo Jesús. No debemos permitir que los problemas y los ataques del enemigo nos quieran apartar del camino y hacernos caer.

Nuestra mirada debe estar puesta en Cristo y no en los hombres, ya que el hombre por ser humano va a fallar y pecar, si nuestra mirada esta en el hombre cada vez que el humano salga vamos a sentir dudas, pero si estamos con nuestra mirada solo en Dios, nada ni nadie podrá hacernos caer.

Dios está dispuesto a ayudarnos y darnos la fortaleza necesaria para estar siempre firmes.

miércoles, 29 de junio de 2011

Vida Nueva




Cuando reconocemos que somos pecadores y le entregamos nuestra vida a Dios, para que El nos limpie de todo pecado, pasamos a tener una vida nueva, ya todo lo viejo, lo que hacíamos antes debe quedar en el pasado, debemos pedir a Dios fortaleza y sabiduría, para que todos nuestros pasos estén cimentados en Dios y sus mandamientos.


Historia de la Biblia:

Lucas 19:1-9.

La Biblia nos relata la historia de un hombre que era publicano, rico y despreciado por todo el pueblo, era una de esas personas a las que deseamos no tener que ver tan seguido, ya que era un cobrador de impuestos. Un día Jesús iba pasando por Jericó, lugar donde vivía este hombre que se llamaba Zaqueo, Jesús se detenía a predicar en las ciudades, y Zaqueo habiendo escuchado de Él, decidió ir a verlo, pero tenía un gran problema, era demasiado pequeño y no podía ver por encima de la gente, todos le tapaban. En el camino se topo con un árbol sicómoro y se subió para poder ver al maestro.

Cuando Jesús paso por ahí, se detuvo y volviendo a ver para arriba invito a Zaqueo a bajar y se invitó a su casa, Zaqueo bajo de prisa y recibió a Jesús con gozo, desde ese momento la salvación llego a Zaqueo y a su casa. Estudie esta historia y cuénteles a los niños como Zaqueo dejo de ser un hombre malo y paso a ser un hombre de Dios.


Pasaje:

“De modo que si alguno esta en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; todas son hechas nuevas” II Corintios 5:17


Aplicación:

Después de conocer a Cristo debemos ser personas diferentes, las cosas viejas debemos dejarlas atrás y empezar a ver hacia delante, creyendo que Dios puede hacer que nuestras vidas cambien por completo.